La cazuela de garbanzos y espinacas es un plato con profundas raíces en la cocina mediterránea y especialmente en la gastronomía española, donde se le conoce como «Espinacas con Garbanzos». Este plato combina la riqueza nutritiva de los garbanzos, una fuente importante de proteínas y fibras, con las espinacas, cargadas de vitaminas y minerales.
Su origen se remonta a Andalucía, en el sur de España, influenciado por la herencia culinaria árabe. Tradicionalmente, se sirve durante la Cuaresma y la Semana Santa, épocas en las que la carne está restringida para muchos. Con el tiempo, ha evolucionado para ser disfrutado todo el año como un plato reconfortante y saludable.
Ingredientes para hacer una Cazuela de garbanzos y espinacas
Para preparar una cazuela de garbanzos y espinacas para 4 personas, necesitarás:
- 400g de garbanzos secos (dejar en remojo la noche anterior) o 2 latas de garbanzos, escurridos y enjuagados
- 400g de espinacas frescas, lavadas (o espinacas congeladas, descongeladas y escurridas)
- 2 dientes de ajo, picados
- 1 cebolla mediana, picada
- 1 pimiento rojo, cortado en dados
- 1 tomate grande maduro, pelado y picado (o una lata pequeña de tomates picados)
- 2 cucharaditas de pimentón dulce
- 1/2 cucharadita de comino molido
- Sal y pimienta al gusto
- 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- 1 taza de caldo de verduras
- 2 huevos duros, picados (opcional para decorar)
- Pan rallado (opcional, para espesar)
Cómo se hace Cazuela de garbanzos y espinacas, elaboración
- Preparación de los Ingredientes: Si estás usando garbanzos secos, asegúrate de haberlos remojado la noche anterior. Escúrrelos y enjuágalos antes de usar.
- Limpia bien las espinacas. Si son frescas, trocéalas si es necesario.
- Cocción de los Garbanzos: Si usaste garbanzos secos: Coloca los garbanzos remojados en una olla grande con agua fresca. Llévalos a ebullición, reduce el fuego y cocínalos a fuego lento hasta que estén tiernos (aproximadamente 1 a 2 horas). Escurre y reserva. Si usaste garbanzos en lata, simplemente escúrrelos y enjuágalos.
- Sofrito de Verduras: Calienta el aceite de oliva en una cazuela grande a fuego medio. Añade la cebolla, el ajo y el pimiento rojo. Cocina hasta que estén suaves y translúcidos, aproximadamente 5 minutos. Incorpora el tomate, el pimentón y el comino. Revuelve bien y cocina por otros 5 minutos.
- Combinar con los Garbanzos: Añade los garbanzos cocidos a la cazuela con las verduras. Revuelve bien para combinar. Agrega el caldo de verduras y lleva a ebullición. Reduce el fuego y deja simmer.
- Añadir las Espinacas: Incorpora las espinacas a la cazuela. Cocina hasta que las espinacas se hayan marchitado y todo esté bien caliente. Si el guiso te parece muy líquido, puedes añadir un poco de pan rallado para espesarlo.
- Temporada y Finaliza: Sazona con sal y pimienta al gusto. Cocina a fuego lento durante unos minutos más para que todos los sabores se mezclen bien. Si lo deseas, puedes añadir huevo duro picado encima como decoración justo antes de servir.
- Servir: Sirve caliente, idealmente acompañado de pan crujiente para absorber el delicioso caldo.
Este plato, simple pero nutritivo, es un ejemplo de cómo ingredientes básicos pueden transformarse en una comida rica y reconfortante, perfecta para cualquier época del año.
